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29 de diciembre de 2014

Ahora.



Ahora que este frío penetra en mi piel congelando cada centímetro de esta.
Ahora que un rayo de sol me hace sentir bien, como protegida del frio.
Ahora que nos encontramos en unas fiestas navideñas donde las familias se juntan para cenar, te echo más de menos que nunca abuela.

Ahora que aprovecho para tomar un café caliente en mitad de la calle rodeada de adornos navideños y caliento mis manos cogiendo el vasito para entrar en calor.
Ahora que tengo tropecientas mantas para ocultarme y dormir entrando en calor.
Ahora que todo el ambiente festivo hace a los demás sentirse bien, a mi me desespera por momentos.

Ahora es momento de reflexionar, pensar en nuevos propósitos que no llegaré a cumplir.
Ahora que aprovechas para ver todas las películas que tenias pendientes por no salir de casa.
Ahora que tú te has abierto el paso adentrándote en mí interior y mantienes mi corazón con tus manos.

Creo que es demasiado tarde. Tarde para seguir pensando en el pasado, tarde para seguir guardando rencor por los errores que yo misma cometí o permití que se llevaran a cabo. Expulso toda la energía negativa que permanecía en mi y me alimento de las buenas cosas que hasta ahora no las tenía en mi rutina.

Se nos avecina la cuesta de enero, más cuesta para unos que para otros. El mes más duro y frió para mi gusto. Y sé que no escribo tan a menudo, pero es que las palabras desaparecen por momentos y no sé como explicar los cambios que estoy pasando.

Y a la vez, es demasiado pronto. Aún nos quedan mil cosas por ver en este 2015 que viene con más fuerza que nunca. Si 2014 ha sido un año bastante grande para mi, 2015 he de decirte que me siento preparada. Mi mundo de soledad se derrumba por momentos. Estoy destrozando las barreras que no me permitían ser completamente feliz. Estoy abriendo mi mente y mi corazón. Le he quitado las telarañas, he curado las heridas y maquillado las cicatrices. Es momento de dejar que la espiritualidad, las nuevas personas que entrar en tu vida y las que ya estaban puedan ayudarte.

Ha llegado el momento, queridos amigos, de comportarme como la mujer que llevo dentro. Con pequeños rasgos infantiles, ya que eso es algo que nunca debe perderse. Pero afrontando la realidad, las responsabilidades y los cambios que puedan llegar.

Ahora que la cita " Ser eres, pero estar no estás" empieza a cobrar sentido.
Ahora empieza el proceso de crecimiento exterior y interior.

15 de octubre de 2014

Querido amigo Kevin:

Querido amigo Kevin, te escribo estas lineas para confesarte algo.
Te he envidiado. Mucho, envidio esa facilidad que tienes para no sentir afecto por nada y mucho menos por nadie. Desde el día en que nos conocimos siempre amé tu forma de ser. Por mucho que intentaras que yo me alejase de ti, más quería hacerlo. Me encariñé de tu pelo, de tus ojos y de tu sonrisa. Sí, conseguiste crear en mi sin quererlo un vinculo afectivo fuerte, extraño como ninguno y bonito.
Porque confié plenamente en ti, desde el primer momento, no te temí, a pesar de que me recomendaras que lo hiciera. Es más, disfrutaba tumbandome a tu lado en la cama y escuchando tus historias.
Tus locuras, tu forma de ver la vida discrepando e indignandote por todo causaban en mi gracia y simplemente era feliz escuchándote hablar.
Reconozco que muchas veces me perdía en tus conversaciones mirando como bebías la cerveza o únicamente fijándome en tus labios.
Y aunque pienso que tú, tan cerrado a los sentimientos y al amor, sí sentiste algo por mi, no sé como llamarlo. Sé que contabas mis bostezos, las veces que me mordí el labio, las que sonreí y como bien dijiste "solo te faltó contar cuantas veces tomé aire y parpadee". Llevo mucho tiempo sin saber de ti, querido Kevin. ¿Cómo no extrañarte si me mandabas audios contándome tus reflexiones a las tantas de la mañana?.

Y sin embargo, aunque te envidié, también llegue a sentir lástima por ti. Alma perdida que se oculta bajo una espiral de cerveza y tequila. Cuantas veces llegué a desear que dejases todo eso, te plantases frente a mi y orgulloso me dijeras que habías retomado las ganas de creer en el sentido de la vida y quizás también esperé una declaración por tu parte.

Supongo que fue mejor así, sin sentimientos por tu parte, sin hacernos daño y sin amor. Aunque a veces el amor causa también alegrías y te calienta en esas frías noches de invierno en las que tu y yo paseábamos por mitad de la calle viendo los adornos navideños.

Siempre esperaré que seas feliz, que vivas tu vida como a ti te guste y que la suerte esté contigo siempre.

Fuiste un loco que me dio la cordura en este mundo de locura.

A mi querido amigo Kevin, espero que si acabas cruzando el charco nunca te olvides de esta pequeña alma de cántaro pelirroja que aquí te espera con los brazos abiertos y una jarra de cerveza.

27 de septiembre de 2014

Días negros.

Y de repente me dí cuenta de que era prisionera en una cárcel de amor. "Duele más el sufrimiento que cualquier moratón" dice la canción, y la verdad es que sí. A veces miro a mi alrededor y estoy rodeada de gente, pero sigo sintiéndome completamente sola. Quizás no aprecie lo que tengo delante de mis ojos. Quizás faltó un poco más de interés por mi parte, pero llegó un momento en el que me cansé de luchar.

Me miré en el espejo y vi el reflejo de una triste, lúgubre y taciturna casi adulta chica de 19 años que perdió el interés por la vida. Una chica que solía ser alegre, divertida, alocada y un poco inmadura si la ocasión lo requería. Con firmes propósitos y metas en la vida. Metas que ya no le importaban, solo quería evadirse y dormir. Desconectar del mundo con sus audífonos y quien sabe si un poco de hip hop.

Pero dormir ya no le llenaba, descansar para ella era como un lujo que ya no podía permitirse. Simplemente cerraba los ojos y se centraba en el latido de su corazón para al final conseguir entrar en trance hasta que le volviese a sonar el despertador. Ya no había sueños, no soñaba con tener alas, no soñaba que era libre, simplemente entraba en trance hasta que le despertada el sonoro despertador.

Se levantaba, miraba el móvil y su reflejo en el espejo y seguía viendo al monstruo en el que estaba convirtiéndose. Ella nunca creyó en la medicación como remedio para el insomnio o el dolor de cabeza, eso era todo mental, psicológico. Y si pudo superar tantos baches podría superar otro más.

Suena "broken hearted girl" mientras os escribo estas líneas, por primera vez sin lágrimas en los ojos después de tantos días, ahora es cuando estoy tomando las riendas de mi vida. Cuando soy yo la que decide, cuando puedo sentirme libre. Leí ayer en un tweet que ponía "Se enamoró de sus alas las cuales intentaba cortarle"


Sinceramente, creí que mi media naranja se escondía en algún lugar cercano a mi, y a ahora pensándolo bien creo que a pesar de ser Valenciana no tengo media naranja, quizás soy el medio limón de cualquier otro hombre tan borde, con cambios de humor y ansioso por encontrarme como yo.

Pero me cansé de buscar, me eché a los brazos de quien se parecía a mi en un mínimo y volví a tropezar con esa piedra la cual lanzo más adelante cuando tropiezo con ella sin darme cuenta de que volveré a caer cuando ande unos pocos pasos más.

He decidido aceptar mi futuro y mi presente como venga, dicen que hay amores que matan, y a mi me están matando poco a poco.




13 de mayo de 2014

Reflexiones humeantes.

Vivo inmersa en una burbuja de humo constante, humo de un cigarrillo que se consume con el tiempo como se consume mi efímera vida. 18 inviernos he pasado ya, 18 duros, fríos y largos inviernos que han dejado trastocado y congelado este joven corazón. Ando buscando un caliente corazón en el que esconderme y hallar la paz que esta melancólica mente necesita. Quizás después de tanto tiempo no encuentre la paz jamás y como dice la canción "aquí dentro tengo paz pero fuera he de dar guerra". Me deprime ver como tanta gente a mi edad ha sido introducida en el mundo de las drogas gracias a sus propios amigos. La gente ya no lee libros, como mucho revistas de coches. La televisión entretiene al populacho con programas pésimos sobre la vida de los famosos que ganan dinero gracias a la audiencia que le dan las personas que a las 16:00 encienden su televisor para ver "Sálvame". Digitalizan los libros en pdf con la triste esperanza de que así los adolescentes puedan leer desde sus casas. Quizás por si alguno de ellos tiene vergüenza de que sus amigos los drogodependientes le vean entrar a una biblioteca pública y salir con un libro. Lo mejor de todo es que ahí no termina la cosa. Los adolescentes adoran salir un viernes por la noche, pasar 2h en la calle mínimo bebiendo alcohol del barato -ese de 4€ de mercadona- para alcanzar tal punto de embriaguez en el que entran a la discoteca sin saber ni tan siquiera sus nombres y salen a las 2h a vomitar. Adoran pisar la pista de baile y dejarse llevar por las luces de colores y la música envolvente. Otra cosa que me quita el sueño es el interés que ponen los adolescentes en criticar a alguien por su aspecto o por el grupo de amigos al que pertenece. Insultan tanto a las personas con sobrepeso como a las esqueléticas, insultan a las que se maquillan y a las que no lo hacen, a los que llevan gafas, a los que visten ancho, a los que utilizan ropa "barata del mercadillo" y a los que se dejan 90€ en una prenda de vestir por el lujo de llevar detrás una etiqueta con una simple marca. ¿Dónde quedaron las libertades a ser uno mismo sin ser discriminado? ¿Dónde quedo el tumbarse en el césped aprovechando el sol para leer una buena novela? ¿Por qué los niños de 13 años no salen a la calle a jugar en vez de estar conectados a una play station o a un ordenador?

Porque estamos en el S.XXI, porque las cosas no son como antes y los tiempos han cambiado. Porque ahora eres más aceptado por la sociedad si les imitas y no eres tu mismo, porque si te pasas un juego eres más "guay" que un niño que ha conducido a su equipo de futbol amateur del barrio a la victoria. Los niños ya no tienen canicas, cromos, tazos o peonzas de madera. Los niños tienen mandos de play, móviles de última generación y tabaco sustraído a sus padres para hacerse el guay y fumar delante de sus amigos.

En fin, esta es la sociedad de hoy en día, y por mucho que me gustaría cambiarla, enseñarles a todos mi colección de novelas sin que me miren como a un bicho raro, eso ya no es lo que se lleva, ahora, señoras y señores tengo que fumarme un porro, poner la musica a tope en el movil y ser super conocida en el instituto por haberme pegado con 2 o 3 y salir victoriosa para que los demás piensen que "molo".

Nuestra sociedad está como nuestro país, en decadencia.

30 de abril de 2014

Just love.

cute couple

Recuerdo tus labios rozando los míos, las yemas de tus dedos jugando al escondite en mi espalda, tus besos bajando de mi mejilla a mis costillas, saltando en picado desde mi pecho. Tu aliento entrecortado en mis tímpanos, tu piel y la mía deshaciéndose bajo este sol abrasador.

Nos deshacíamos de la ropa con la mayor brevedad posible, dejando nuestros cuerpos desnudos, abrazados; pegados el uno al otro como se pega la ventosa al cristal.

Recuerdo tu voz, casi inaudible. Susurrábamos por miedo a ser descubiertos. Hacíamos el amor como enamorados, pero follábamos como salvajes, con deseo, con pasión, con embestidas.
Yo arañaba tu espalda y tu mordías mi labio. Entrabas y salías de mi cuerpo llenándome de amor y vaciándome el alma.

Acariciabas mis mejillas, yo perdía mis dedos entre tu pelo, terminábamos juntos y nos recostábamos de nuevo cogiendo aire y abrazándonos. Yo me recostaba en tu pecho y tu acariciabas mi melena.

Entonces, y solo entonces dejaba salir un esperado te quiero.

9 de abril de 2014

Goodnight and joy be with you all.

Ed Sheeran - The parting glass

Siento la sangre correr por mis venas, esta vez más despacio, yazgo en este camastro sin fuerzas para mover mis dedos y sentir que ellos al menos se pueden mover. Mis piernas se duermen y no puedo moverme, mi respiración se relaja y ya no siento las pulsaciones de este corazón que me ha acompañado durante tanto tiempo. Mi cabeza redacta mi ultimo deseo antes de cerrar los ojos para siempre, debo de pensar bien que cual quiero que sea mi última voluntad. Han pasado horas desde que he sido encerrada en esta triste y lúgubre habitación del hospital. Los médicos dicen que no me queda tiempo, que en menos de 24h dejaré para siempre este planeta, el cual ha visto guerras, catástrofes, atentados, inundaciones, incendios, accidentes, lágrimas y sonrisas. Yo no quiero morir, no quiero dejar solos a mis padres ni a mis hermanos. No puedo irme sin verles sonreír una vez más. Les he provocado tanto dolor al largo de estos años que ya no me quedan lágrimas para llorar, les he tratado mal, les he apartado de mi igual que hice con mis buenas amistades, todo por estar sola, por no llevarme conmigo al inframundo a alguien inocente.He pecado, he blasfemado, he deseado cosas inimaginables y ahora, cuando me quedan escasos minutos de vida me arrepiento. No quiero que lloréis por mi, no quiero que os sintáis culpables. Oigo voces lejanas que me invitan a descansar la vista y dormir un poquito más, pero no quiero dormirme, no quiero dejarles aquí por que sé que cuando cierre los ojos no los volveré a abrir. Siento las vendas en mi cabeza tapando esas heridas que yo misma provoqué, siento como mis astilladas costillas se me clavan en los pulmones dificultando más todavía mi respiración. No han dejado a nadie que entre a acompañarme, a hacerme compañía en esta mi última noche. Ojala pudiera sentir otra vez el dulce tacto de mi madre, acariciando mis mejillas y animándome con lágrimas en los ojos a salir de esta horrible pesadilla. O la cálida voz de mi padre apartando de mi el miedo a morir con suaves y meditadas palabras. Puedo ver a mi hermano al otro lado del cristal echo polvo, ha pasado días y noches al otro lado de ese horrible cristal vigilándome. Ojala pudiera hablar con el por última vez, decirle que cuide de mi sobrino y que no le permita meterse en la misma mierda en la que yo entré siendo una inconsciente adolescente. Sé que me merezco todo esto que me está ocurriendo, sé que es una manera de pagar a toda esa gente a la que hice daño alguna vez.
Mis manos también se han dormido y mi voz ya no sale de mi boca debido a esos tubos que tengo que me ayudan a seguir con vida. Sólo quisiera pedir que acaben con este sufrimiento. Dar las gracias a mi familia por estar conmigo en los buenos y malos momentos. Dar las gracias a mis amigos por insistir en seguir a mi lado cuando los intenté apartar. Han dejado entrar a mis padres y a mi hermano, con un rápido gesto de despedida saco el tubo de mi boca y les digo: "Buenas noches a todos vosotros, no os olvidaré nunca."
Cerré mis ojos, el cansancio pudo conmigo y me deje llevar por esa blanca luz.

Algo inesperado me vuelve a la vida, alguien me reanima, no me dejan irme todavía.
3 meses después aquí estoy, es el primer día que llego a casa, me han dado el alta. Ya estoy casi curada, y la cara de alegría de mi familia es una gran ayuda para mi recuperación."


Con esta pequeña historia queridos lectores solo intento que os deis cuenta de que hasta el más enfermo si se aferra a la vida puede conseguir sobrevivir, nunca os deis por vencidos, siempre hay otra salida, no os rindáis y luchad por lo que realmente deseáis.



8 de abril de 2014

Almost 19

Realmente, ¿Qué somos? ¿Cual es nuestro objetivo en la vida? ¿Para que hemos nacido?, Llegas a la mayoría de edad, que son los mejores años de tu vida y pasan volando, ni te das cuenta y por mucho que no quieras crecer sigues haciéndote mayor. Cuando empecé este blog hace unos años nunca pensé que llegaría a las 40.000 visitas como he llegado ahora. Sólo quería compartir mis sentimientos y emociones con la persona que esté al otro lado de la pantalla para leerme. A todos los que habéis dedicado un minuto de vuestras vidas para leerme, os lo agradezco. Casi 19 primaveras, otoños, inviernos y veranos, con sus distintos momentos inolvidables. Quizás este blog me ha ayudado a madurar, quizás me he dejado y escribo solo cuando un vacío llena mi devastado corazón y muchos problemas se cuelan en mi cabeza para dejarme un tiempo como "out" fuera de línea o desconectada. He conocido a personas que han echo mi vida un poco más sencilla y otras que me la han destrozado y complicado. He amado hasta querer morir, he odiado hasta rabiar. He llorado de rabia, de impotencia, de dolor, de felicidad, de pena y sobretodo he llorado sola. He sentido lo que es ser el centro de atención de un grupo que intenta ayudarme y he sentido lo que es permanecer años encerrada en casa sola sin que nadie te llame para salir a tomar algo. He visto a gente llorar y me he alegrado y a su vez he visto gente llorar y me ha partido el corazón y he acabado llorando yo también. He odiado a alguien antes de conocerle por juzgarle sin saber siquiera cómo era ni saber su historia y he amado a un pequeño bebe antes de nacer y poder verle la cara y rozarle la mejilla suave con miedo a que se vaya a romper. He pasado cosas inimaginables, y no quiero seguir creciendo, no quiero que se repitan, no quiero tomar el control de mi vida ni hacerme mayor. No quiero perder a mi madre y a mi padre, ni tener que dejar atrás las cosas que tengo ahora.

6 de marzo de 2014

Recuerda quien eres.


"Sus rizos tan parecidos a los de cupido y su sonrisa tan sincera como la de un recién nacido que sonríe por primera vez al mundo. Recuerdo su voz a las 8 de la mañana dándome los buenos días y recordándome que soy su princesa. Las yemas de sus dedos tan suaves secando las lagrimas que caían por mis mejillas. El final acercándose, a pasos agigantados. Y yo mientras recordando aquella canción que decía: "propongo escaparnos del fin una noche más". Propongo marchar atravesando ciudades, países y continentes rumbo a otro lugar donde nadie nos conozca y podamos inventar nuestra historia a nuestro antojo. ¿Que tal méxico? Preguntaba yo, con Carlos Santana de fondo en el coche y a 120km por hora. Recuerdo mirarle la cara mientras el conducía, mirarle y detenerme en cada centímetro de su rostro y guardándolo en mi memoria para que así al cerrar los ojos pudiera volver a verle. Recuerdo el color brillante de sus ojos marrones y también me veo a mi a las 10 de la mañana un sábado en su dormitorio llevándole una taza de café únicamente vestida con el encaje negro y su camisa vaquera.
Me hubiera gustado poder contarle a mis nietos cómo era él, describirle nuestros altibajos y nuestras conversaciones por teléfono a altas horas de la mañana pero cuando le recordaba mi rostro se tornaba taciturno y una tristeza inundaba mi ser al volver a recordar que él únicamente existió en mis mejores sueños. Que soñé con el mil y una noches, viviendo historias diferentes y durmiendo más horas al día de lo normal solo para volver a verle. No sabía su nombre, ni su procedencia, tampoco su edad, tan sólo sabía que fue un ángel que se poso en mis sueños y que a día de hoy alguna noche vuelvo a soñar con él. Cuando las luces se apagan y vuelvo a ocultarme bajo las sábanas, yo y mi soledad."
No sé cuantos días, meses o años me quedan, solo sé que a mi edad debemos disfrutar de cada momento como si fuera el último, amar como si cada nuevo amante fuera el primero, dar sin recibir a cambio, hacer locuras que acaben en un susto pero que luego podamos reír recordándolas. Y es que mi vida se basa en recuerdos, mi adolescencia se va terminando y debo convertirme en una adulta, y os aseguro que no quiero, no quiero crecer, como le pasaba a Peter Pan, quiero seguir siendo aquella niña que no tenía preocupaciones, y a la que los años le pasaban tan lentos que parecían lustros.

He pasado tanto tiempo sola que aún me cuesta volver a convivir con alguien, he tenido tanto miedo que sigo mirando a mis espaldas cuando voy por la calle, y he llorado tanto que ahora soy fría como la nieve.
Pero ahora mismo quiero dejar este mensaje a mi yo del futuro:
"Si estas leyendo esto y ya tienes 30-40 años o 50 incluso, recuerda como eran estos días y que la imagen de tu madre te ayude a ser fuerte como ella lo fue cuando fue necesario, no te dejes achantar por nadie y nunca dejes que te manipulen, remember who you are."


29 de enero de 2014

Don't be afraid, it's just love.


Patrick Watson - The Great Escape
Y de repente, como un terremoto apareciste tu, con tu calma, con tu tranquilidad, con tu apaciguadora voz y tu inocente risa.

"Recuerdo que al llegar ni me miraste, fui solo una más de cientos, sin embargo fueron tuyos, los primeros voleteos".

Comenzó siendo una simple charla, pero en tus ojos había algo que yo aún no había sido capaz de ver, eres como un perfume de esos carísimos que te compras y que tienes miedo a que un día se acabe y lo pierdas. Sin embargo, como si fueras una ruleta rusa decidí apostar todo lo que tenía por ti. Sentir de nuevo la magia de ponerte nerviosa cuando veo que he recibido un mensaje tuyo. La magia esa que nadie puede ver ni tocar pero que te hace sonreír como una idiota preguntándote dónde está la trampa.

Y aquí me tienes de nuevo, escribiendo para los cuatro gatos que me lean, para ti y para mi. Sonando de fondo Patrick Watson y soñando en como será tu sonrisa o como me veré con tu brazo rodeando mis hombros entre la multitud y este frío que nos hace desear romper con la distancia que nos separa.

Imagino ir al cine contigo y ver una película de drama, o de terror de esas que no te gustan y que yo paso la mayoría del tiempo con los ojos cerrados. O nos imagino tostándonos al sol en una de las playas de la costa blanca. Y luego pienso en lo maravilloso que sería poder hacer eso contigo una y otra vez, contigo a mi lado riendo, sorprendiéndome como siempre cuando me dices algo bonito que no me espero.

Y luego, como una inocente adolescente escribo tu nombre sobre mi mano otra vez con tinta negra, tan oscura como mis ojos. Buscando la luz al final del túnel, confiando en que se acerca San Valentin y podremos cenar juntos a la luz de una tenue vela.

Hay tantas cosas que quiero hacer contigo que empezaré por comerte a besos.

12 de enero de 2014

Vagos recuerdos.

Imágenes, momentos, palabras, sonidos, golpes duros y cicatrices aún abiertas que revolotean por mi cabeza y siguen abriéndose paso entre las arterias que llevan a mi pobre corazón. Ese corazón marchito, malherido y resistente que no deja de latir un día más para demostrarme que tengo que ser fuerte y que me queda mucho por vivir. Cicatrices que a esos insensibles no les importó hacer sobre mi piel y que aun que se haya escondido la marca bajo esta caucásica epidermis el dolor que me produjo sigue reluciendo a plena luz de este oscuro día. Días como hoy en los que despierto de una mala noche con sudores y pesadillas y que me gustaría olvidar quien soy y de dónde vengo. Pasar el día en la cama con la única compañía que estas tristes letras que ahora suenan en el reproductor. Día a día me hago camino entre la gente con mi Ipod sonando rap y hip hop, tapada con la bufanda hasta los ojos y inmersa en este mundo de ficción en el que me introduzco cada vez que pongo los auriculares en mis oídos. Deshaciéndome del ángel y del demonio de mis hombros voy alejándome de todas esas voces de mi cabeza que me indican cuando voy a caer otra vez por ese precipicio que me ahoga y en el que me mantengo en el borde sentada viendo la vida pasar. Olvidando cada día más los detalles más insignificantes y rememorando las fechas más dolorosas que causaron estragos en esta enfermiza mente. Fluyo bajo mis sábanas como las rimas en la base de este rap que me acompaña y que me inspira intentando olvidar, intentando desconectar un día más. Cada día más atea, creyendo en nada, solo teniendo fe en mi y en las consecuencias de mis actos. Más solitaria y más enganchada a esta mierda que son los recuerdos. Su voz, su risa o sus gestos cada vez más difíciles de recordar, sintiéndome indiferente hacia esos comentarios de los que quieren herirme. Muchos creyeron conocerme, muchos creyeron que era fuerte y otros muchos me vieron caer sobre mis rodillas una vez más.
Creciendo y madurando un año más, empezando otra vez el mes de Enero, más frío que el anterior y a la vez mas solitario, por esas personas que van alejándose de mi vida sin causa justificada. Imagino ser otra, más guapa, más lista o más afortunada, imagino que me río de todos aquellos que me dijeron que no podría conseguir lo que me propusiera y les enseño el dedo corazón. Luego despierto de ese pequeño coma en el que me había sumergido y abro los ojos con esas lágrimas que deben estar hechas de ácido por que me queman cuando huyen por mis mejillas.