Vistas de página en total

25 de octubre de 2011

Mi otra mitad.



Por un efímero instante pensé que esto que yo sentía no era real, era imaginación mía, todo lo que un día amé ardió bajo mis pupilas dejándome en una lúgubre soledad en la que cada sentimiento que pasaba por mis venas se desvanecía cual haz de luz a primera hora de la mañana. Y todo lo que teníamos escapó furtivamente de nuestros brazos, se deshizo en nuestras bocas dejando un suave sabor amargo, entonces, comprendí que nuestro amor nunca tendría fin. Podía ser de miles de maneras pero nunca terminaría, la estación del amor y el cariño se sustituyo por la de amargura y desamor. Puedo recordar todavía estragos de toda nuestra historia pero juro solemnemente que es inevitable que desaparezcas de mi débil mente. Es imposible el conseguir que mi débil corazón sustituya el "Bom Bom" de su sístole y diástole por un frágil suspiro, es casi inaudible pero no hay otra melodía en mi mente que no sea tu nombre. Atrévete y deja las suspicacias de lado ven a mi y deja que acaricie tus labios con el mismo amor con el que un día inundaste mi corazón. Me expongo ante el diablo si por amarte he pecado, créeme mi amor, que no hay otro dueño de mi cuerpo que no seas tú.